Digitalización una realidad para las PYMEs

Digitalización, ya una realidad para las pequeñas y medianas empresas

Aunque adaptarse a la era digital es un proceso que muchas empresas PYME pueden obviar, en el ámbito de los negocios debería ser imprescindible su aplicación. La digitalización en el 2017 es ya una realidad cada vez más necesaria para las PYMEs que necesiten adaptarse lo más rápido posible para no quedarse atrás y perder competitividad.

Factores como las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC), la investigación y desarrollo (I + D) y la gestión documental, se han vuelto cruciales. Toda empresa «actualizada» debe conocer los riesgos, entender los cambios de la era digital y cómo éstos están moldeando una nueva cultura laboral.

Competencia digital

Un gran porcentaje de las pequeñas y medianas empresas (PYME) son conscientes de que la digitalización es, y será, un gran reto en estos próximos años. Para ello requieren implementar estrategias que estén orientadas al marketing relacional (CRM), es decir, una interacción más estrecha con el cliente.

La empresa actualizada y competitiva debe considerar elementos como el SEO y la usabilidad de los usuarios en su entorno web. También es importante saber lo que opinan respecto a la experiencia de navegación y búsqueda de contenidos en su página web, y usar de forma eficiente dicha información (feedback) y los recursos digitales disponibles.

Esto implica una fuerte presencia omnicanal o multicanal tanto en la red como fuera de ella, haciendo uso de redes sociales y explotando la potencialidad de su página web corporativa. Por ende, es necesaria la incorporación de un diseño responsable (responsive web design) que vaya de la mano con dispositivos móviles, smartphones, tablets.

El corazón de la digitalización está en la gestión eficiente de la información. Por esta razón, aprovechar el big data es una tendencia que aunque compleja, pocos conocen de su enorme efectividad.

Consideraciones relevantes

Estos cambios, por muy sencillos que parezcan, también implican riegos y costes asociados. De hecho, uno de los grandes temores de los empresarios es la seguridad relacionada con el entorno digital, su grado de complejidad y lo que cuesta su implementación.

Muy a pesar de esto, debería ser una consideración secundaria cuando se toma en cuenta la globalización, las posibilidades de negocios y los beneficios comprobados. Esto puede verse facilitado creando alianzas estratégicas para impulsar el desarrollo de su PYME con ayuda profesional.

En resumen, estamos inmersos en la era digital y aprovechar sus canales de comunicación, captación y ventas, debería ser una opción muy en cuenta para cualquier PYME que no quiera quedarse relegada o «anticuada».

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