Existen muchos tipos de impresoras que pueden diferenciarse según sus funciones, pero también, según su tipo de conectividad. La conectividad es precisamente una de las características que más importancia tiene a la hora de elegir una impresora. Hoy en día la conexión por cable está en claro retroceso y las conexiones inalámbricas cobran más fuerza que nunca. En la actualidad los modos de conexión en una impresora atienden a tres tipos: Impresoras por cable, impresoras por WiFi e impresoras por Bluetooth.
Impresoras por Cable
Las impresoras por cable actuales suelen contar ya con conexiones inalámbricas incorporadas en su mayoría. No hace mucho tiempo el tipo de conexión por cable más común es el puerto COM o RS-232. Este tipo en concreto es el usado por las impresoras más antiguas y está prácticamente en desuso. Otro de los conectores utilizados en este tipo de impresoras es el conector Cetronics que otorga una conexión más avanzada, pero actualmente también se encuentra en desuso.
Ahora, estos cables se han sustituido en la mayor parte de los casos por un cable USB. Actualmente, este tipo de dispositivo se emplea para todo: desde móviles hasta impresores o incluso televisores. La tecnología ha avanzado tanto que ya podemos encontrar cables USB con velocidades de transferencia de hasta 10 GB. Todo lo necesario para proporcionar energía suficiente como para llevar a cabo impresiones rápidas y seguras.
Impresoras con Bluetooth
El Bluetooth es una interfaz inalámbrica que permite transmitir datos entre diferentes dispositivos sin un elemento físico. Es decir, sin cables. De esta manera se puede enlazar computadores, teléfonos, auriculares, etc. Una impresora con este tipo de conectividad se enlaza al dispositivo que elijas, normalmente el ordenador o el teléfono móvil. En ocasiones puede requerir una clave de emparejamiento, todo dependiendo de los fabricantes. (En cualquier caso, no suele ser difícil de emparejar).
Sin embargo, (Y aquí viene él, pero), este tipo de conectividad no puede funcionar en distancias amplias (Algo que sí consigue el WiFi en mayor medida) Este tipo de conectividad ha quedado algo obsoleta y en la mayoría de las veces ha sido sustituida por la conexión WiFi. Como desventaja, podemos añadir que este tipo de conexión no permite tramitar datos de gran volumen. Así que si lo que quieres es imprimir imágenes con gran resolución vas a tener que decantarte por otro tipo de conectividad. Eso sí, en caso de que se trate de textos o documentos de baja resolución, no vas a tener ningún tipo de problema.
Si lo que buscas es imprimir un documento, pero el dispositivo no tiene Bluetooth siempre puedes comprar un adaptador de Bluetooth. Este tipo de mecanismo se incorpora a la parte frontal del equipo(Normalmente). Así, si solo debes constatar que el adaptador se encuentre conectado para luego enviar los datos de tu dispositivo. Y todo, sin cables.
Impresora WiFi
Las impresoras más actuales cuentan con conexiones WiFi. De esa manera, es posible emparejar tu dispositivo móvil o tu ordenador a la impresora para ejecutar ciertas órdenes que permitan imprimir el contenido que necesites. La principal ventaja de este tipo de conectividad es que te permite decir adiós a los cables. Cables molestos que acaban cogiendo polvo o enredándose con el robot de limpieza. Además de eso te permite imprimir documentos incluso si no tienes ordenador o no quieres encenderlo de propio para ello.
Una ventaja es que además de ofrecer comodidad resulta un ahorro importante. Imprimir con conexión WiFi es tan sencillo como emparejar el dispositivo a tu red. Es relevante que mantengas a salvo tu seguridad, ya que esta conexión puede crear accesos no deseada o “intrusos” que puedan acceder a tu información.
WiFi Directo
Quizás hayas escuchado alguna vez el término WiFi Direct y tengas dudas sobre si es exactamente igual al WiFi clásico que todos conocemos.
Este término hace referencia una forma de WiFi más inteligente que el WiFi común. Esto quiere decir que con el WiFi Direct no vas a necesitar ningún punto de acceso para transmitir los datos, ya que el propio WiFi enviará la información al dispositivo que quieras vincular y lo mejor, mucho más rápido.
En resumen:
Si debes elegir entre una impresora con Bluetooth y otra con WiFi, no lo dudes: El WiFi te va a ofrecer mayores prestaciones en cuanto a conectividad y rapidez.
Y si lo que quieres es dotar tu impresora de un mayor control siempre tienes la opción de escoger una impresora que además de WiFi, tenga conectividad NFC.
En la actualidad es posible encontrar impresoras que tengan estos tres tipos de conectividad y además diferentes puertos USB con los que leer tarjetas de memoria o Pendrives.
Como ves, existe todo un mundo de posibilidades en cuanto a conectividad en impresoras. La mejor manera de saber qué necesitas es dejándote asesorar por especialistas que te escucharán y comprenderán con exactitud cuáles son tus requerimientos o tus necesidades.
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